jueves, 1 de diciembre de 2011

Cosas que me hacen falta

Hace tres meses que estamos aquí. Todo lo importante ya lo hemos visto, ha habido muchas fiestas (aunque algunas no nos acordamos), ya hemos conocido nuevos amigos… ¿Y ahora qué?

Y ahora pensamos en cosas que nos hacen falta – por lo menos yo. Desde que llegué aquí tenía un gran problema con las compras. Cuando me fui de compras por primera vez en Bilbao, me quedé muy sorprendido. No sé que le parece a otra gente pero es verdad que la manera de “ir de compras” es muy distinta que en Chequia. Lo que echaba de menos era un hipermercado. La ciudad en la que vivía tiene aprox. 70 mil habitantes, pero hay 3 hipermercados y yo siempre comparaba las ofertas e iba de compras solo al que era más barato. ¿Y aquí? ¡¡¡Qué feliz estaba cuando había encontrado Eroski en Garbera!!!

Bueno, el primer problema ya lo he resuelto. Pero los siguientes no son tan fáciles… Ya he encontrado un “casi-hipermercado”, eso me ha puesto muy contento, ahora puedo ir de compras. Pero hay otro problema – ¿con qué? ¿Con autobús? ¿Andando? Joder, ¡¡¡yo quiero mi coche!!! A veces tengo tantas ganas de conducir… Solo dar una vuelta por los alrededores de San Sebastián… ¡¡¡Ay, madre mía!!!

Pero lo más que echo en falta es mi perro. Cuando tenía 9 años, le encontré en la calle. Era un día después de la Navidad y alguien le había echado en la calle como una basura. Le llamé Rex y hemos pasado juntos estos doce años. Por primera vez le he abandonado por tanto tiempo. Cuando me fui a Donostia, mi madre pensaba que se moría. Me echaba tanto de menos que ni comía, ni bebía… Al cabo de dos semanas se puso mejor y confió en mi madre. Mi madre me dijo esto unas semanas después cuando todo estaba bien para no preocuparme. Nunca creí que mi perro estuviera tan unido a mí. Bueno, con tu familia puedes contactar a través de skype, tienes un móvil, a tu familia le dices que volverás y cuándo, pero ¿cómo explicar todo esto a un perro que entiende solo „Martin“?

Aún me hace falta una cosa más, pero hablaré de este tema quizás la próxima vez. Y aparte, desde que he encontrado una serie en CNN+ “Sexo en Nueva York”, además con subtítulos para sordos, no es el problema tan grave ;-)

1 comentario:

  1. Hola Martin!

    Lo puedo intender bien porque a mi tambien me hace falta mi gato!!
    Lo tengo desde hace 15 años y estaba preocupada antes de llegar aqui por el mismo motivo: es la primera vez que me voy por un tiempo tan largo.
    Cada vez que ablo con mis padres por skype lo veo pero el no me reconoce:(
    Mi madre me cuenta que esta' bien y siempre duerme sobre mi cama,me ha dicho que tal vez maulla mirando mis fotos en mi habitacion pero no se si es solo una illusion de mi madre.
    Tengo mucha gana de verlo por Navidad!

    Novella

    ResponderEliminar